Las emociones forman parte de nuestro día a día. El saber identificarlas, expresarlas y compartirlas con los demás nos ayuda a comprenderlas y saber gestionarlas.
El otro día cuando estábamos en la asamblea varios niños dijeron que dormían con sus papas porque por la noche tenían miedo. Y empezamos hablar del MIEDO.
Descubrimos que muchos de nosotros tenemos miedos, y como decía alguno no uno ni dos sino "muuuchos":
- a una serpiente de un ojo.
- a las arañas.
- a que me cierren la puerta.
- a la oscuridad.
- a las brujas y los monstruos.
- a los vampiros.
- a los zombis.
- a estar sola en la oscuridad.
- a los ladrones.
- a que me dejen sol@.
- a los leones y los lobos.
- a los monstruos de 10 ojos...
Estuvimos hablando que cuando tenemos miedo estamos asustados y tristes. Pero que no pasa nada por tener miedo y decirlo, que es mejor porque así sabemos lo que nos pasa, y que además todo el mundo, hasta los mayores tienen miedos. Hasta la seño, cuando le preguntamos, también nos dijo que tenía miedos.
Después de hablar de los miedos, algunos niñ@s dijeron las cosas que hacían para no tener miedo, y así poder ayudar a sus compañeros a vencer el miedo:
*Dormir con un cuento debajo de la almohada, para soñar con el cuento.
* Abrazar un peluche.
* Llamar al hada quitamiedos.
* Encender una luz.
* Llamar a los papas.
Al final la Seño nos hizo una relajación para ayudarnos a quitar los miedos: nos dijo que nos imagináramos que estábamos dentro de un globo, un globo precioso lleno de los colores que más nos gustarán, el globo volaba por el cielo. Al llegar a la altura del mar, nos dijo que buscáramos dentro del globo un saco, porque en él íbamos a meter nuestros miedos. Nos teníamos que imaginar nuestros miedos y meterlos dentro del saco. Cuando todos los miedos estuvieron dentro del saco, lo cerramos muy fuerte, con una cuerda especial, y lo tiramos al mar. Poco a poco veíamos como el saco se iba hundiendo en las profundidades marinas y con él nuestros miedos. Después de esto nos sentíamos mas ligeros y contentos, así que el globo volvía a volar más alto y rápido hasta llevarnos a nuestro lugar preferido.
Como nos gustó tanto la relajación decidimos hacer el globo y el SACOQUITAMIEDOS para tenerlo en clase.
Primero lo pintamos entre todos y pusimos nuestras fotografías, después cada uno dibujó/escribió en una hoja su miedo o miedos. Una vez que tuvimos todo preparado fuimos echando nuestro miedo dentro del saco, que de forma misteriosa se los tragó todos.
En un principio el saco iba a permanecer junto al globo, pero a algunos de nosotros no nos convencía la idea,porque queríamos que el saco se hundiera en el mar,y poder liberarnos de los miedos. Así que la seño recortó el saco y lo hundió en el mar, este fue el resultado final.